domingo, 20 de diciembre de 2015
miércoles, 25 de noviembre de 2015
Veo, veo...Noviembre-Diciembre
Este mes voy a proponer unos cuantos
objetos todos ellos muy fáciles. Espero que os animéis a echarles un vistazo.
El
primero de todos es una estrella doble, de las más conocidas, se trata de Mesarthim la Gamma de Aries. En el pequeño mapa de la constelación se ve perfectamente cual
es.
En
mis notas de observación, hechas con un telescopio de 150mm de diámetro, anoté
que se separan fácilmente con solo 74X, y que son, o al menos así me parece, de
un color blanco, tirando a azulado. Las magnitudes son +4,2 y + 4,3,
prácticamente iguales. Están separadas ocho segundos de arco y el ángulo de
posición es 0º, lo que quiere decir que están alineadas en el eje Norte- Sur.
Fueron
descubiertas por Robert Hooke en 1664, cuando buscaba un cometa.
Vamos ahora a la constelación de Perseo,
allí nos encontramos con el cúmulo abierto NGC1039, pero si no nos gusta ese
nombre también le podemos llamar M 34.
Esto
es lo que tengo apuntado después de una observación realizada con el mismo
telescopio que la anterior: Muy abierto, llena el grado de campo que tiene el
ocular. Se aprecia un primer plano de estrellas más brillantes y un segundo de
menor brillo. Da la impresión de que lo rodea un anillo de vacío, aislándolo
del fondo estelar. En el centro justo, hay una estrella doble, se trata de la
h1123. Son dos estrellas de magnitud +8, las dos iguales y están separadas
veinte segundos.
Y ahora vamos con los dos últimos objetos que propongo. Son tan
fáciles que no se si merece la pena
poner un mapa de localización, pero bueno, lo voy a poner.
Se trata de M45, si, Las Pléyades. Las
podemos observar tanto a simple vista como con prismáticos o telescopio. Como
mejor se ven es con pocos aumentos para tener un buen campo de visión. Aunque
tampoco está de más intentar ver la nebulosidad que hay en las cercanías de
Mérope.
Lo
mismo podemos hacer con las Hyades. Es un cúmulo más viejo y cercano que Las
Pléyades.
Y
también, muy cerca, a la izquierda de Aldebarán, tenemos otro cúmulo NGC 1647.
viernes, 4 de septiembre de 2015
Veo, veo..Septiembre-Octubre
En la frontera entre el Cisne y Cefeo se
encuentra NGC 7008. Esta curiosa nebulosa planetaria que fue descubierta por el
infatigable William Herschel en 1787 durante uno de los sistemáticos barridos
que realizaba en busca de objetos nuevos. Está en su catálogo como H
I-192.
Tiene
un diámetro de, aproximadamente, un año- luz y se encuentra a dos mil
ochocientos años-luz de distancia. Esto se traduce en que tiene un diámetro
angular de 1,4´ de arco. Las coordenadas son las siguientes:
AR 21h
00m 32s Dc +54º 32´36”
Tengo anotada una observación realizada con un telescopio de 250mm de
diámetro a 221x. Esto es lo que anoté: “ Se ve sin filtro como una tenue
nebulosidad cerca de dos estrellas. Mejor visión con el filtro UHC. Con 221
aumentos y sin filtro se ve aún mejor. Se aprecia alguna estrella dentro de la
nebulosa. También hay nebulosidad en la estrella situada a la derecha en el
dibujo”.
Aquí está el dibujo y una
foto hecha con el mismo telescopio para poder comparar.
Y un mapa más detallado para facilitar su localización por el sistema
tradicional. Aunque con el sistema GoTo no habrá ningún problema.....creo yo.
lunes, 29 de junio de 2015
Veo, veo... Julio-Agosto
![]() |
Varios cúmulos en Scutum |
Más de una vez he comentado que, alrededor de objetos populares y conocidos, se encuentran muchos otros dignos de mención.
En la constelación del Escudo tenemos
uno de los cúmulos abiertos más famosos del firmamento. Me estoy refiriendo a
NGC 6705, M11, también conocido por el
cúmulo de los patos salvajes. En fin, me quedo con M11 para no liar la cosa.
Este
cúmulo es una preciosidad. En unos prismáticos un poco potentes o un telescopio
de cualquier focal es todo un espectáculo su observación. Descubierto por Gottfried Kirch
en 1681, fue incluido por Messier en su catálogo en 1764.
A
partir de M11, y moviéndonos hacia el Sur, tenemos a la vista otro bonito
cúmulo, este de tipo globular. Se trata de NGC 6712. Probablemente lo descubrió Le Gentil en 1749, que lo describe
como una verdadera nebulosa, comparándolo con M11. En efecto, si en el anterior
vemos estrellas separadas, en éste se ven más compactadas, como corresponde a
un auténtico globular.
Ahora, hacia el Oeste, encontramos otro
cúmulo del catálogo de Messier, el que lleva el número 26.
Aquí nos volvemos a encontrar con un
cúmulo abierto, más disperso que M11.
Teniendo
en cuenta que estamos en una de las zonas de la Vía Láctea más poblada de
estrellas no está nada mal. Tiene un diámetro aproximado de unos 22 años luz.
Charles
Messier lo descubrió en 1764.
Y,
para broche final, otro cúmulo abierto: NGC6664.
Lo
encontraremos muy cerca de la estrella a del Escudo, en el mapa se puede ver la
posición. Es más abierto que los precedentes, pero también es interesante su
visión.
Fue
descubierto por William Herschel el 16 de Junio de 1784.
Esta
es una pequeña muestra de la riqueza de objetos que podemos encontrar en la
zona del Escudo.
Hay
muchas más cosas, pero eso lo dejo para los exploradores que, una vez hayan
visitado estos cúmulos, se decidan a continuar recorriendo la Vía Láctea.
miércoles, 13 de mayo de 2015
Veo, veo.... Mayo-Junio
¿Cuántos
de nosotros no habremos visto alguna vez la galaxia M101, en la Osa Mayor?
Seguramente muchos ( y si no la has visto, ya va siendo hora).
Es
muy fácil de encontrar, aunque no tanto de ver. Si partimos de una de las
estrellas dobles más populares de firmamento, Mizar y Alcor (aprovechemos para
echarles un vistazo), veremos un reguero de estrellas hacia el Este que nos
llevarán a las cercanías de M101.
Se
trata de un objeto grande, tiene un tamaño angular de 29´x 27´. Su magnitud
tampoco está mal +7,9. Pero esto puede llevarnos a engaño, ya que tiene un
brillo superficial muy bajo. Ya sabéis, no es lo mimo una estrella de esa
magnitud, con todo su brillo concentrado en un punto, que repartir esa luz por
una superficie, por decirlo de alguna manera, mucho mayor.
Por
lo tanto, puede ser que la tengamos en el campo del telescopio y no consigamos
verla. A este tipo de objetos les afecta mucho la luz ambiental. Como siempre,
cuanto más oscuro esté el cielo, mejor.
Pero resulta que, esta galaxia además
de estar el catálogo de Messier con la entrada número 101, también se puede
encontrar en el New General Catalogue, popularmente NGC, con en número 5457.
Este
catálogo se basa en observaciones visuales y se da el caso de que, aparte de
este número que designa al objeto completo, también tiene otras entradas en ese
catálogo que corresponden a zonas más brillantes que, normalmente, corresponden
a regiones HII.
Pues de eso va este Veo, veo..., de intentar
ver estas zonas con número propio dentro de M101.
Y
para eso están estas dos fotos, una con la galaxia, tal cual y la otra
indicando la posición de estos NGC escondidos.
Suerte!
miércoles, 11 de marzo de 2015
Veo,veo....Marzo-Abril
Bueno,
pues después de unos cuantos años sin un eclipse de Sol que llevarnos al
telescopio, y no cuento el que vimos en Aínsa en 2013 que fue una birria, al
fin tenemos uno que, aunque no lo veamos como total desde Zaragoza, si que será
de un 70%, aproximadamente.
Si
que será total desde las islas Feroe y Svalbard, pero como eso cae un poco
lejos vamos a dejarlo e intentaremos verlo desde casa.
En esta imagen
global se puede ver la franja de totalidad. Es la curva más oscura que rodea
Groenlandia. Pues por esas latitudes es por donde caen las islas Feroe y
Svalbard.
Así
que vamos a centrarnos en Zaragoza. Estos son los datos que nos interesan:
Tendrá
lugar el 20 de marzo de 2015 y estas son las horas del fenómeno para Zaragoza
calculadas con el programa OCCULT:
Primer
contacto 8h 8m 51s altura del Sol sobre el horizonte
21º
Máximo 9h 13m 49s “ “ “ 32º
Último contacto 10h 24m 03s “ “ “ 42º
La magnitud
del eclipse al máximo será de 0.728, o sea que se ocultará un 72% del Sol. No
está nada mal.
Las horas son
en Tiempo Universal, así que habrá que añadir una hora para tener la hora
oficial en España en esa fecha.
En esta
simulación se puede ver como se va a desarrollar el eclipse y cuanto va a
ocultar la Luna al Sol.
Durante el
fenómeno se notará una pequeña disminución de la luz ambiental, al fin y al
cabo no es un eclipse total. Pero, si queremos verlo hay que tomar las mismas
precauciones que si fuésemos a observar el Sol.
No
hay que usar ni negativos velados no cosas por el estilo. Para verlo a simple
vista lo mejor son unas gafas de estas que venden para estos casos, son baratas
y seguras.
Y para el telescopio un filtro solar
puesto delante del objetivo, bien de los de Baader o de vidrio . También es
seguro el método de proyección.
Y sobre todo no utilizar unos de esos filtros
solares que se roscan a los oculares.
Está
en juego nuestra vista, así que no hay que arriesgarse nada.
Y DESPUÉS DEL ECLIPSE......
Bueno, pues a pesar de algunas nubes finas al comienzo del eclipse, que se espesaron más al final ( por la tarde estuvo lloviendo), he podido hacer fotografías de todo el fenómeno.
Las hice con un telescopio de 80mm de diámetro y 480mm de focal, con filtro solar, sobre montura ecuatorial y una cámara Olympus E-330.
En este montaje hecho con once de las ochenta y cuatro tomas que hice, se pueden ver las diferentes fases del fenómeno.
Y, con todas las fotos he confeccionado esta animación.
Y DESPUÉS DEL ECLIPSE......
Bueno, pues a pesar de algunas nubes finas al comienzo del eclipse, que se espesaron más al final ( por la tarde estuvo lloviendo), he podido hacer fotografías de todo el fenómeno.
Las hice con un telescopio de 80mm de diámetro y 480mm de focal, con filtro solar, sobre montura ecuatorial y una cámara Olympus E-330.
En este montaje hecho con once de las ochenta y cuatro tomas que hice, se pueden ver las diferentes fases del fenómeno.
Y, con todas las fotos he confeccionado esta animación.
domingo, 4 de enero de 2015
Veo, veo....Enero-Febrero
¡¡Que bonita es la M42!!, bueno, vamos a echarle un vistazo primero, pero después nos iremos a una zona que, a simple vista, parece más aburrida y con pocas estrellas, la situada a la izquierda de Orión.
Es la constelación de Monoceros, El Unicornio para más señas, que está al Este de Orión. Contiene más objetos interesantes de los que puede parecer, lo que ocurre es que, teniendo Orión al lado es muy difícil no caer en la tentación de movernos con el telescopio por esa hermosa constelación. José Luis Comellas la llama La Catedral del Cielo.
Bueno, a lo que vamos. Entre las maravillas de Monoceros quiero destacar por una parte a la nebulosa Roseta. Ésta es una región HII parte de una gigantesca nube molecular. Tiene varios números NGC: 2237, 2238, 2239 y 2246 para las diferentes partes de la nebulosa, y NGC 2244 para el cúmulo abierto que nos servirá para localizarla. Ya solamente con el buscador es posible ver este cúmulo abierto. Para la nebulosa, lo mejor es usar un filtro antipolución, un UHC servirá, para poder verla como debe de ser. Si tienes una cámara modificada, o sea, que le hayan quitado el filtro de origen, con cualquier objetivo, te saldrá una estupenda foto.
El segundo objeto es mucho más pequeño y menos espectacular, pero no menos interesante, se trata de NGC2261, también conocida como Nebulosa Variable de Hubble.
¿Una nebulosa variable? Este objeto tiene la particularidad que varía en tamaño, brillo y forma. Bueno, en realidad lo que es variable es la estrella R Monocerotis, que está situada en el extremo sur de la nebulosa. A esta estrella la rodea un disco de acrección protoplanetario que lanza dos intensas corrientes de gas que colisionan con el polvo y gas del medio interestelar. Parece ser que este disco, más que la estrella en sí, es el causante de la variabilidad observada.
S.W. Burnham, observador y especializado en sistemas estelares binarios, fue el descubridor de este peculiar objeto en el siglo XIX. Pero los que desentrañaron su verdadera naturaleza, al estudiarlo de manera independiente en 1940, fueron dos grandes astrónomos, el norteamericano George H. Herbig y el mejicano Guillermo Haro, de allí que a este tipo de objetos se les conozca como Objetos Herbig-Haro.
Fue el primer objeto fotografiado con el telescopio de Monte Palomar, el 29 de enero de 1949 por Edwin Hubble, que ya lo había estudiado anteriormente en los observatorios de Yerkes y Monte Wilson.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)